Abstract
El Libro de la vida, de Santa Teresa de Jesús, es un texto al que el autor recurre reiteradamente. En ese libro, descubrió que la santa tomó la determinación de ser una buena hija de la Iglesia alrededor de los cuarenta años, después de tocar a un Cristo, encogido por los pecados de los hombres. Su vida es la de un corazón inquieto. Su vida y pensamiento muestran el rostro amable y exigente de la aventura cristiana que vale vivir.