Eucaristía, banquete sagrado
Resumen
Desde el momento en que nacemos se nos da la gracia de formar parte de la Iglesia mediante el Sacramento del Bautismo; de igual forma, el Sacramento de la Eucaristía nos refuerza aquella unión con la iglesia y más aún con Cristo, que al ser partícipes de este banquete ya no somos solo nosotros sino una común – unión. Jesús al momento de instituirla nos enseñó a reconocerlo en él para luego ser compartida hacia los demás por medio de sus apóstoles y formar parte de su gloria; sin embargo, esta práctica de repartirla se ha ido dando de manera equívoca, perdiendo en medida su esencia, aquella que alimenta y sirve de guía al bien espiritual. El valor que se le da a la Eucaristía en estos tiempos, son momentos en los cuales se percibe un mayor debilitamiento de fe en el hombre, dando como respuesta malas posturas y hábitos que desfavorecen todo lo que nos otorga la comunión, volviéndola un simple rito de actos humanos. Por ende, los sacerdotes, quienes, siendo preparados para dar a conocer a Cristo, tienen la misión de corregir y enseñar al fiel, el verdadero valor y respeto que representa la hostia, con su debido ejemplo.
Colecciones
- Trabajo académico [291]